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En la Facultad de Ciencias y Tecnologías Computacional (CITEC) se graduaron este jueves 28 de junio, dos nuevos Ingenieros en Ciencias Informáticas: Reinier Suárez Estévez y Rodolfo Moreno Díaz, quienes agradecieron por tal logro, no solo a la familia, baluarte imprescindible en la formación de los jóvenes; sino también a la Revolución Cubana, por abrirles las puertas de la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI).

Ellos cumplieron el sueño de graduarse como profesionales de la educación superior, con la defensa de la tesis: “Módulo de edición cartográfica vectorial para la plataforma ULTRÓN del Centro GEYSED”, contribuyendo a mejorar la labor del Sistema de Información Geográfica (SIG), que se encuentra en nuestra institución.

Nos explicó Moreno Díaz, que su investigación contribuye a que, al incorporar la información del SIG al marco digital, en el Centro de Geoinformática y Señales Digitales (GEYSED) de la UCI, se puedan corregir los errores humanos, gracias a las funcionalidades que implementaron, lo cual facilita el trabajo, con mejores visualizaciones en los mapas de la representación vectorial.

Aunque no lo hemos dicho, Reinier Suárez Estévez es Título de Oro y nos dijo cómo se puede lograr: “No sabría decir una fórmula. Pienso que simplemente, cuando el estudiante comienza su carrera, debe tener conciencia y centralizar la idea de que vino fundamentalmente a estudiar; aunque, por supuesto, participe en todas las actividades extensionistas que se incluyen en la vida de un universitario; pero la principal tarea es el estudio.

“También es importante mencionar que se deben aprovechar todos los recursos que te brinda esta Universidad, desde la navegación, hasta una buena base material de estudio y un excelente claustro de profesores capacitados. Hay que saber beneficiarse con lo que ponen en nuestras manos. Si te esfuerzas, puede salir este resultado, que en mi caso no esperaba”, concluye con modestia.

Dayamí y Rafael, los padres de Reinier, influyeron en que su hijo obtuviera el Título de Oro, otorgado a quienes tienen un promedio general académico a lo largo de su carrera de 4,75 o superior. No solo ellos se sienten sumamente orgullosos, sino también el resto de la familia, amigos y compañeros del integral muchacho.

Opinan que, para lograr buenos resultados en los hijos, es necesario la unidad de la familia, brindarles amor, apoyarlos, educarlos y exigirles desde la cuna que lleguen al máximo de sus capacidades, estando siempre presentes y siendo ejemplos, para que se formen fuertes y poder cumplir el sueño de todo padre, de que sus descendencias sean profesionales comprometidos con la sociedad. Ese es el mayor reto, concluyen.

Igualmente emocionados y felices, Candelaria y Rodolfo, los progenitores de Moreno Díaz, añadieron que al graduarse los hijos, también hacen realidad los sueños de los padres, lo cual no sería posible en un país tan limitado de recursos, sin el sistema socialista y la Revolución que tenemos.