Por más Socialismo, este 1ro de Mayo
El entusiasta colectivo de la Universidad de las Ciencias Informáticas llevará las mil 300 banderas cubanas, de la Unión de Jóvenes Comunistas, la Federación Estudiantil Universitaria y la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media, que cerrarán la marcha en la Plaza habanera. Foto: Eduardo Esparza Nogueira
La esperanza no se pierde porque el amor lucha, en las peores condiciones, contra el mal. El amor le da más importancia al SER que al tener. Y Cuba bien lo sabe. Sus trabajadores lo saben. Los jóvenes, lo saben...
¿El Día de los Trabajadores?
Hay que remontarse al primero de mayo de 1886 para conocer el origen de esta emblemática fecha. En Estados Unidos, la reivindicación de la jornada de ocho horas llevó a más de 300.000 trabajadores a la huelga. Una protesta que en Chicago alcanzó tintes especialmente trágicos.
Hasta entonces, tanto en Estados Unidos como en Europa se exigía a los obreros que trabajaran de 12 a 14 horas durante seis días a la semana.
En Francia la mecha de las protestas prendió con fuerza y los trabajadores fueron conquistando progresivamente y con muchos esfuerzos los derechos que ahora se disfrutan. El Senado francés ratificó la jornada de ocho horas y en 1936 el período de vacaciones pasó a ser pagado. Una serie de victorias que paradójicamente fueron desinflando el poder de influencia de los sindicatos. A partir de las décadas de los 60 y 70 el Primero de Mayo, comenzó a adentrarse en la historia como fecha reconocida. Pero poco queda hoy del “espíritu de Chicago”.
El Día de los Trabajadores sigue siendo, aún así, la fecha elegida por muchos para reivindicar derechos todavía por conquistar o derechos ya conquistados a los que no se está dispuesto a renunciar.
El proletariado cubano tiene el honor histórico de haber participado en el estreno mundial del Día Internacional de los Trabajadores, el primero de mayo de 1890, fecha acordada un año antes por el Congreso de la II Internacional efectuado en París.
A pesar de que el movimiento obrero cubano era incipiente por entonces, bajo el dominio de España, aquella lucha tuvo eco cuando el Círculo de Trabajadores de La Habana organizó el Primero de Mayo de 1890 un desfile que culminó en un acto con más de 3 mil personas y una veintena de oradores.
Luego vinieron tiempos difíciles bajo el dominio estadounidense...
En 1959 la clase obrera cubana recobró su unidad, con el triunfo de la Revolución dirigida por Fidel. Desde entonces la efeméride reúne a millones de trabajadores, campesinos estudiantes y miembros de las Fuerzas Armadas a todo lo largo y ancho del país.
Cada Primero de Mayo ha tenido sus propias características, sin embargo, todos muestran el sentimiento patriótico y antiimperialista. En un proyecto que no es perfecto, pero si perfectible, se hace cada día lo incontable o lo necesario: con todos y para todos.
En el mismo año 1959, con motivo del Día Internacional de los Trabajadores, por primera vez en nuestra historia, un millón de personas de las tres provincias occidentales — obreros, campesinos, estudiantes, soldados, intelectuales— estrenaron como área de concentración del pueblo, la entonces Plaza Cívica (actual Plaza de la Revolución José Martí). Ese día se ponía de manifiesto la principal arma con que contarían los cubanos, a partir de entonces, para defender su derecho a decidir por sí mismos su futuro: la unidad. Y por esa razón, este Primero de Mayo las principales avenidas y plazas de la Isla se llenarán de júbilo y compromiso.
Ese gran poder de convocatoria de los primeros de mayo ha convertido estos años en formidables episodios del gran combate de la Revolución frente a las más disímiles maniobras de sus enemigos.
Y así, bajo el lema de Preservar y perfeccionar el Socialismo, una vez más, marcharemos, porque la UCI también se une como tradición a esta gran ola de pueblo, de los trabajadores que en Cuba tienen su día.