Universidad de Excelencia: 12 años de historia
: Esta es la joven UCI, la académica, científica, productiva, deportiva, cultural y ante todo revolucionaria y combativa
Inicios de un largo viaje
Llegaban desde todos los municipios y lugares más recónditos del país. ¿Qué habrá allí? ¿Qué vamos hacer aquí? ¿Realmente será esto una Universidad? ¡Que fanguero hay! Interrogantes y frases como estas se hacían muchos. Pero lo que sí puedo asegurarles es que era una tropa de jóvenes y educadores, decididos a conquistar el futuro.
Estudiantes que desde la distancia rememoraban la compañía de sus padres y otros seres queridos, pero un único objetivo les permitía olvidar toda nostalgia y enfrentar todo obstáculo habido y por haber, ellos querían estudiar Ciencias Informáticas.
Con la premisa de una Universidad de Excelencia, inspirada en el pensamiento del Comandante en Jefe Fidel Castro, la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI) abría sus puertas y se convertía en noticia dentro y fuera de Cuba.
En un ameno intercambio con los estudiantes, el 19 de julio de 2003 el líder histórico de nuestra Revolución, lo explicaba también.
Universidad de Excelencia es desarrollar la mejor universidad que se haya desarrollado jamás, buscando lo óptimo, lo más perfecto posible dentro de las cosas humanas, lo más nuevo, lo más creativo. Algo que no solo sirva a los intereses de nuestro país. Una institución de Excelencia tiene que ser capaz de ver cómo se proyecta el mundo, cómo se proyecta la humanidad y qué contribución pueda hacer en primer lugar para salvarla.
Doce años han transcurrido desde que aquellas certeras palabras fueran escuchadas por la primera avanzada de los jóvenes del futuro. El sueño de Fidel se convertía exitosamente en lo que es hoy: la Universidad de las Ciencias Informáticas.
La UCI de Fidel y de jóvenes profesionales
Con la misión de formar profesionales altamente calificados y comprometidos con su Patria, la Universidad continúa desarrollando aplicaciones y servicios informáticos que contribuyen a la informatización de la sociedad cubana.
Esta es la joven UCI, la académica, científica, productiva, deportiva, cultural y ante todo revolucionaria y combativa. Una institución en la que el sentido de pertenencia, la responsabilidad y solidaridad se transmiten en el día a día. Es la misma Universidad del sueño de Fidel, donde se usaron botas contra el fango, la de la Misión Milagro, la que ha apoyado siempre a la Revolución. La UCI son los estudiantes y trabajadores que construyeron su propia Universidad, aquella que supo levantarse ante las adversidades del huracán Ike. Sin duda alguna, la UCI son todos los miembros de la comunidad universitaria que hoy han sido partícipes de todos los procesos sustantivos que en ella se desarrollan.
Una felicitación especial a esa primera tropa… a los fundadores, de igual modo a quienes los han sucedido. El modesto homenaje también a otros más nuevos, a los 12 648 graduados y a esos que pronto lo serán. A todos, las más sinceras felicitaciones y queda abierta la convocatoria para seguir construyendo la Universidad del Futuro, la Universidad de Excelencia, teniendo como motivación el concepto de nuestro líder Fidel Castro.