El Patrimonio nacional, provincial y local tenemos que salvarlo
Libro: cultura y antigüedad encierran páginas de acuerdo común. De esas cuartillas apreciadas, ajadas y salvadas en el tiempo por el ojo humano disertó este martes el director de la Biblioteca Nacional, Dr. Eduardo Torres Cuevas, en la Biblioteca de esta universidad.
La Biblioteca Cubana: tradición, profesionalidad y proyección en el siglo XXI condujo al relato del también historiador nuestro.
Archivos de la historia cubana son conservados en la Biblioteca Nacional desde siglos pasados. El sentir del criollo fue reflejado en los diferentes textos. Obras como Espejo de paciencia, informes, libros sobre la educación, la geografía, la filosofía, preservan el legado del pensamiento de Félix Varela, Luz y Caballero y Felipe Poey. La biblioteca cubana cultivó el conocimiento más allá del aula.
De la Biblioteca Nacional como preservadora de la memoria histórica de la nación dejó constancia Torres Cuevas. El triunfo de la Revolución impulsó la atención a las bibliotecas públicas y su paso al sistema nacional de bibliotecas.
El Patrimonio nacional, provincial y local tenemos que salvarlo, expresó Cuevas. Al programa de la lectura se refirió también el historiador cubano. En tal sentido exhortó a la promoción de la lectura y a incentivar a la conservación de los fondos que atesoran las bibliotecas del país.
En un espacio de debate, los presentes intercambiaron sugerencias y preocupaciones en cuanto a la preservación de los documentos científicos digitales, las bases de datos, entre otros.