Efervescencias en restauraciones de obras de arte
Al abrir sus puertas la Universidad de las Ciencias Informáticas (UCI), el Ministerio de Cultura, conjuntamente con algunas de sus instituciones, promovieron la ambientación artística del centro, con el objetivo de formar a los profesionales de la Informática, asociados a una vida cultural activa. Para ello fueron convocados un grupo de artistas para que emplazaran sus obras en esta casa de altos estudios.
Al cabo de los trece años de haber sido ubicadas 27 obras originales y otras reproducciones se inició, a finales de 2016 la restauración de ellas. En busca de respuestas, el periódico Mella entrevistó al MSc. Ernesto Miguel García González, director de Extensión Universitaria.
- ¿Cómo comenzó el proceso de restauración?
- Ya las obras necesitan ser restauradas porque se han deteriorado al estar a la intemperie y asumir todo el efecto negativo del medioambiente: la lluvia, el sol…
“Esa es la razón por la cual a inicios del año 2016, se comienza un proceso de contratación, con la Empresa ATRIO, del Ministerio de Cultura, para iniciar la restauración de las obras. Firmamos el contrato en marzo, cuando se comenzó a elaborar el dictamen técnico para evaluar los daños de cada obra y cuánto significaba su renovación presupuestariamente.
“En mayo de ese mismo año se realiza una reunión técnica entre la UCI y los especialistas de ATRIO. En septiembre visitan la Universidad la mayoría de los artistas autores de las obras, que también avalaron la restauración.
“Ya el 16 de diciembre comienza a materializarse la restauración de las obras del vial principal de la entrada de la UCI, lo que se conoce como Prado de las Esculturas, con la limpieza de la oxidación de Mundo de faros, Parto de las Formas, MPX-35 y Maternidad, que son las primeras que se encuentran a la entrada.
“Simultáneamente, comienza a trabajarse en los murales que están en algunos edificios docentes y en el propio Centro Cultural, entre ellos el de Juan Vicente Bonachea (Cuando la muerte sedujo al Maestro), que se encuentra en el docente José Martí, que ya está terminada. Es el primer mural que se restauró completamente, y ahora se trabaja en la obra de Setsuko Ono, titulada Aspiración, que se encuentra en el Docente 1. El resto está en el proceso de restauración”.
- ¿Cuánto implica monetariamente esas restauraciones?
- Este proyecto está en el orden presupuestario de unos 170 000 CUC, que se asumirá a partir del concepto de que tenemos que salvar ese patrimonio de la Universidad.
- ¿Qué importancia le concede a la restauración de esas obras?
- Es realmente importante porque es un patrimonio cultural, que además los artistas entregaron en su momento, entre los años 2004-2006, y no resulta nada agradable que se pierdan las obras de arte.
“Esa es la causa de por qué se restauran, llevando además a la práctica el concepto de Fidel cuando diría en el año 1993, en pleno Período Especial, que la cultura es lo primero que hay que salvar, porque la cultura transmite ideas y pensamientos, educa. Bajo esa premisa se ha iniciado este proceso.
“Por supuesto, cada obra tiene una tasación puesta por el artista cuando se emplazó, desde el punto de vista monetario, pero lo más importante no es cuánto se gasta en la restauración; lo más importante es salvar el patrimonio cultural, reitero, y que las generaciones de estudiantes, profesores y trabajadores de la Universidad lo asuman como suyo”.
- ¿Valor artístico de las obras?
-Estamos hablando de que los autores son artistas de la plástica cubana; de ellos, hay Premios Nacionales de Artes Plásticas. Son destacadísimos y toda la comunidad universitaria debe conocerlos, porque son obras de la vanguardia artística cubana.
“Muchos pudieran pensar: es mucho lo que significa desde el punto de vista económico; pero más importante es la formación del estudiante, con esa amplia cultura a que aspira siempre la Revolución al formar a los profesionales cubanos: que aprendan sobre las obras de arte, que aprendan a apreciar ese valor artístico que está ahí, que además es parte de la cultura material legada a esta universidad y que debe sobrevivir por muchas generaciones”.
- ¿Qué pasaría si no se restauran a tiempo las obras de arte?
- Si las obras de arte no se restauran a tiempo, se pierden, y posteriormente, los nuevos estudiantes que ingresen a la Universidad y los nuevos profesores y las generaciones que transiten por ella no van a conocer que aquí existió un Prado de las Esculturas, una Plaza Mella, una Plaza Niemeyer con una obra emblemática de ese autor, una obra de un artista italiano frente al policlínico (Mike Rosseto), una obra de otra artista extranjera (Setsuko Ono).
- Un mensaje a la comunidad.
- Que profesores y estudiantes, a través de sus colectivos de brigadas, y trabajadores a través de las secciones sindicales, puedan visitar estos lugares y apreciar lo que significan, incluyendo también las que se encuentran en el Centro Cultural, que la mayoría son originales, como la obra de Lescalle que está en el centro de la Plaza Lam, los murales que circundan y están dentro del propio Centro Cultural, son obras también originales que se van a restaurar.
- ¿Cuándo se prevé la conclusión de la restauración?
- El tiempo de restauración puede estar en el orden de un año completo. Nuestra aspiración es que para el décimo quinto aniversario de la UCI esté terminado el proyecto. Estamos hablando, finales de noviembre, quizás diciembre de 2017.
“Pero es un proceso largo, requiere de bastantes materiales, de fuerza de trabajo, de delicadeza, de muchos elementos particulares que hay que tocar en cada obra porque el tiempo que estuvieron afectadas es considerable.
“Aspiramos a celebrar los 15 años con un mejor Prado de las Esculturas y con todas las obras restauradas como los artistas lo han pedido.
“Para concluir, quisiera reconocer a todos los que hoy están apoyando este proceso de restauración, que vale la pena, como diría Calviño”.